TOROS

Soy antitaurina, y esto, lo digo con orgullo lo que no es óbice para pensar que la declaración de Montilla me pareció respetuosa, la libertad es poder elegir sí o no teniendo en cuenta los hábitos sociales. En lo único que discrepo es en que a veces los hábitos sociales hay que acelerarlos si su uso conlleva sufrimiento sea de un animal de orden superior(el hombre) a otro inferior(el resto) o sufrimiento en cualquiera de sus formas y conductos. Si no démosle la vuelta: pongamos al toro la inteligencia del hombre y viceversa, seguro que eso no nos haría ninguna gracia ni fiesta, pero voy más allá, se acuerdan de los circos romanos, ya no es tiempo de romanos sino de máquinas y clonaciones, que no por ello es mejor el panorama, es simplemente diferente pero la evolución de un cerebro superior, algo que ya está aquí, debería implicar la correcta manipulación de las emociones de forma que se pudiera erradicar el sufrimiento. El sufrimiento está íntimamente unido al pensamiento, tanto si es físico como psíquico, esperemos que ese cerebro cuya evolución es ya superior al nuestro, trabaje esas áreas que no hemos conseguido dominar para tener una vida más digna, más placentera, más sana, con unos niveles de autoestima adecuados a este siglo. Ah, y que no amenacen con ponernos de nuevo la parte de arriba del bañador no sea que les salga mal y al final nos quitemos definitivamente la de arriba y la de abajo, y ellos, pues también claro.