La escritura como un oso de peluche que te acompaña que lo ensucias y lo lavas y lo peinas y despeinas y lo vistes y desvistes y le hablas y te habla
y otras veces te enfadas con él esperando algo no sé qué más y lo tiras al cuarto oscuro que se olvide de ti que te olvides de él.
Luego comes la sopa y una palabra vuela entre el vapor el oso el oso el oso tu oso. Y lo rescatas del cuarto oscuro y algo así como un cobijo vuelve a ti está en sus ojos de plástico que sólo tú y para ti sientes vivientes.
Mi osito de peluche.
ResponderEliminarLa escritura como un oso de peluche
que te acompaña
que lo ensucias y lo lavas
y lo peinas y despeinas
y lo vistes y desvistes
y le hablas y te habla
y otras veces te enfadas con él
esperando algo no sé qué más
y lo tiras al cuarto oscuro
que se olvide de ti
que te olvides de él.
Luego comes la sopa
y una palabra vuela entre el vapor
el oso el oso el oso tu oso.
Y lo rescatas del cuarto oscuro
y algo así como un cobijo vuelve a ti
está en sus ojos de plástico
que sólo tú y para ti sientes vivientes.